EXCELENTE FIN DE CURSO DE PROYECTOS EN SALUD DE LA MAESTRÍA EN GERENCIA HOSPITALARIA DE ESPAE
Opciones
-¿Qué esperas para ir a estudiar?- le digo a mi ahijado que seguía jugando en vez de hacer sus tareas como habíamos acordado con su papá cuando me pidió encargarme de él por unas horas (que me parecieron un siglo).
-¿Para qué voy a estudiar tío? Mi profesora me dejó muy claro que no tiene sentido.
- ¡No soy tu tío y es imposible que te haya enseñado eso.
- Claro que sí. Ella nos dijo que nadie podía saber todo de todo.
- Obvio ¿pero qué tiene que ver eso con no estudiar?
- Simple. Si descarto saber todo de todo, me quedan tres opciones que llegan a lo mismo: saber nada de nada, saber nada de todo o todo de nada.
La evaluación de proyectos no es una herramienta cuantitativa que arroja un número que determinará si se hace o no una inversión. Por el contrario, es una técnica que uda a optimizar la asignación de recursos al mejorar el diseño de la idea mediante un análisis sistemático de identificación y evaluación de todas las opciones para llevarlo a cabo. Saber algo de todo (proyecto para fabricar un producto genérico como una panadería tradicional) o todo de algo (productos altamente especialización, como hacer pan para celiacos) también son opciones, así como lo es hacer nada.
Consecuencia
"No creo que la intención de Dios haya sido que sólo los
pecadores disfruten de las cosas buena de la vida", dijo Aga Khan II,
patriarca de la secta musulmana ismaelita a una consulta de si no era
contradictorio ser pastor de almas con su placer mundano por la buena mesa.
El evaluador de proyectos, si bien actúa en este rol como un
profesional, obviamente puede emprender su propio negocio. Es más, es deseable
que lo haga, puesto que así le será más fácil tener empatía con el empresario
que lo contrata. Lo que no puede hacer, es aprovechar la información que conoce
al estudiar un proyecto para terceros en beneficio propio. Por ello, debe
necesariamente advertir al inversionista antes de ser contratado los sectores
donde él hace sus propias inversiones.
Nicho de negocios
─ Tío─ me dice mi ahijado─ estuve pensando en
lo que me dijo sobre los “nichos” de negocio.
─ ¿Tú piensas? ─ le digo sarcásticamente
─ Sí,
a veces─ me responde con naturalidad. ─ Se
me ocurrió evaluar un proyecto de empresa funeraria donde no
metería la urna al “nicho”. Compraría una urna grande muy bonita y metería
adentro de ella otra muy barata con el finado. Después del servicio fúnebre,
entierro al muertito con esta última y la otra me la llevo de vuelta para usarla
por lo menos 30 veces más.
─ Jaimito (tiene 36 años), ¿crees que la familia
en un momento de dolor estará dispuesta a hacerlo por ahorrarse unos pesos?
¿No crees que en una muestra de su cariño tratará de darle la mejor sepultura
que pueda? ¿Qué sabes de empresas funerarias? Te dije, al empezar a trabajar
trata de arrimarte a un buen árbol que te dé sombra y proteja. Trata de
trabajar en una funeraria un tiempo hasta conocer el negocio y después te
independizas.
─ También estuve pensando en eso, pero creo
que está equivocado. No se aplica en parte de otoño e invierno porque, además que
se le han caído todas sus hojas, lo que menos quiero por el frío es que me dé
sombra. Y como la mayoría de la gente se muere en invierno, tendría que dejar
de trabajar en los mejores meses.
El mercado de
un proyecto se debe definir tomando en consideración una serie de variables que
se pueden clasificar de diferente forma para ayudar a entender el mercado:
a.
En relación con su oportunidad: insatisfecha
o satisfecha Cuando el consumidor se debe trasladar a otra comuna para comprar,
existe demanda insatisfecha. La demanda satisfecha se puede dividir en demanda
saturada (cuando no es posible hacerla crecer) y no saturada (cuando es posible
hacerla crecer con apoyo de acciones de marketing).
b.
En relación con su necesidad: básica (la que
se requiere ineludiblemente) y suntuaria (la que satisface un gusto más que una
necesidad).
c.
En relación con su temporalidad, la demanda
puede ser continua, cíclica o estacional. Una demanda continua es la que tiene
un carácter estable y permanente en el tiempo (fallecimientos por causas
naturales). Una demanda cíclica es la que ocurre cada cierto número de años (fallecimiento
por epidemia de virus Hanta). Una demanda estacional es la que se produce
permanentemente todos ciertos periodos del año (muertes por problemas
bronco-respiratorios en invierno).
d.
De acuerdo con su destino: final (al
consumidor) o intermedia (la que demandan como insumo otros fabricantes).
e.
De acuerdo con la permanencia: de flujo o de
stock. La demanda de flujo es de carácter permanente (compra de televisores por
crecimiento de la población), y la de stock es de carácter finito (renovación
de televisores por mejora tecnológica).
CRISTIANO
Después
de cenar y mientras pasábamos a la sala a tomar el café, la esposa de uno de
mis amigos invitados dice acercándose al piano:
- ¡No me digas que además de escribir tocas!
- Toco, pero no piano- le digo con picardía.
-¿Tú tocas? Já. Lo mejor que sabes hacer bien con
tus manos es escribir y sujetar la pipa-dice mi esposa.
- ¡Que toque, que toque…!-empiezan a corear todos, menos mi esposa que me
mira con esa cara de ¡Ni se te ocurra!
Igual me
senté y empecé a tocar feliz de captar la atención de todos por primera vez en
la noche.
A los tres minutos de iniciada mi actuación, uno
de mis amigos me interrumpe:
- Tú debes ser muy buen cristiano
- ¿Por qué?-pregunto con curiosidad, mientras veo al resto que mientras
aplaude se levantan a buscar sus abrigos diciendo que era muy tarde y que debía
irse.
- Porque tu mano derecha no sabe lo que hace la
izquierda.
Ningún emprendedor tiene que saber todo acerca de su negocio ni
por ello dejar de hacerlo. Lo primero es ser capaz de reconocer sus
limitaciones y la importancia de contar con los equipos de apoyo calificados en
las materias donde tiene falencias. Tan importante como esto es poder
constituir con ellos un equipo de trabajo que se complemente e identifique con
los objetivos del emprendedor. Lograr que se alegren por los éxitos y hacerlos
sentir que son una pieza importante del engranaje es fundamental para tener
resultados positivos.
El trabajador, por otra parte, requiere sentirse recompensados
por sus aportes, reconocido por sus esfuerzos y respaldado con lo necesario
para poder hacer un mejor trabajo.
Por ello, al evaluar el proyecto se debe determinar cuál es la
remuneración justa, no en sentido de “justicia” sino de la que optimice el
costo total. En muchas empresas se observa que menores remuneraciones van
acompañadas de una alta rotación de personal, que obliga a asumir una serie de
otros costos comúnmente ignorados como, por ejemplo, los gastos de
desvinculación, contratación y capacitación, además de los costos ocultos de
una menor productividad inicial durante el proceso de aprendizaje, el aumento
de mermas y material dañado o el incumplimiento de plazos con los clientes.
Lo anterior no debe considerarse como una recomendación a
aumentar las remuneraciones. Todo lo contrario. Es un ejemplo de que una
decisión debe considerar todos los efectos, directos e indirectos, para
resolver mejor. A veces, podría ser conveniente pagar una remuneración baja si
el ahorro de costos es mayor que el costo que se asume por un trabajo más
deficiente.
El análisis es similar al que se hace con un proveedor que,
ofreciendo insumos de muy buena calidad y a mejor precio que sus competidores,
nunca cumple con los plazos de entrega: una opción es cambiarse a uno más caro
y que cumpla con los plazos y otra es quedarse con él y tomar la precaución de
hacer las órdenes de compra con mayor antelación.
Correcto si se explica el supuesto
- ¿Cómo te fue en la prueba de biología?- le pregunto a mi ahijado que debió rendir su examen oral para no reprobar por tercera vez el curso.
- Mal, tío. El profesor creyó que me estaba riendo de él cuando me preguntó "¿Cuántos pulmones tenemos?"
- Le respondiste que dos, ¿cierto?
- No, le dije cuatro.
- ¡¡¿Pero cómo se te ocurre semejante tontera?!! Si ayer lo estudiamos- le digo molesto.
- Es que como me preguntó "cuántos tenemos", yo pensé en los dos de él y en los dos míos.
- Mal, tío. El profesor creyó que me estaba riendo de él cuando me preguntó "¿Cuántos pulmones tenemos?"
- Le respondiste que dos, ¿cierto?
- No, le dije cuatro.
- ¡¡¿Pero cómo se te ocurre semejante tontera?!! Si ayer lo estudiamos- le digo molesto.
- Es que como me preguntó "cuántos tenemos", yo pensé en los dos de él y en los dos míos.
Llama la atención ver que el evaluador escribe en primera persona plural, o incluso en primera singular, la mayoría de los informes del proyecto encargado. "Mi" demanda, "mi" costo, "nuestra" Inversión o "nuestra" rentabilidad, entre otros, no corresponde. El informe debe tener la seriedad de una redacción profesional donde se debe usar siempre la tercera persona singular para referirse a cualquier aspecto del proyecto (no de "nuestro" proyecto). El evaluador no invierte ni participa de la rentabilidad.
Cuando se calcula la rentabilidad del proyecto, lo único seguro es que esa no será. Es imposible acertar en todas las estimaciones futuras. Por eso, cuando se entregue el resultado de las inversiones, demanda, costos, beneficios o cualquier otro, es necesario explicar la base de cálculo y el supuesto en que se fundamenta la respuesta.
Consenso de panel
- Quiero que todos aportemos lo mejor de nosotros en esta reunión, con el objeto de hacer mejor nuestra organización y generar un proactivo ambiente de trabajo en equipo que pretendo marque el estilo de gestión mientras dure en el cargo- le informo a todos los ejecutivos superiores de la empresa de mi compadre que, ante los problemas financieros que enfrentaba me solicitó hacerme cargo de la gerencia para tratar de sacarla adelante.
Mientras cada uno de los directivos iba expresando su satisfacción por el nuevo esquema de trabajo y aceptando el desafío de aportar lo mejor de cada uno, veo que se levanta mi ahijado e hijo del dueño.
- ¿Dónde vas Diego?. No hemos terminado la reunión- le digo con tono autoritario para que quede claro que no me importa ser su padrino.
- A buscar café, tío. ¿No nos dijo que esperaba que aportemos lo mejor de cada uno?
Varios de los presentes me acompañaron en mi llanto.
Mientras cada uno de los directivos iba expresando su satisfacción por el nuevo esquema de trabajo y aceptando el desafío de aportar lo mejor de cada uno, veo que se levanta mi ahijado e hijo del dueño.
- ¿Dónde vas Diego?. No hemos terminado la reunión- le digo con tono autoritario para que quede claro que no me importa ser su padrino.
- A buscar café, tío. ¿No nos dijo que esperaba que aportemos lo mejor de cada uno?
Varios de los presentes me acompañaron en mi llanto.
El método de Consenso de panel se usa en estudios preliminares de la viabilidad de un proyecto para que un grupo de expertos trate de predecir ciertos comportamientos de mercado, ya sea de clientes, competidores o proveedores.
Una de sus debilidades es que si no se selecciona bien a los integrantes del grupo, puede primar la opinión del que tiene más personalidad, más currículum o más influencia por sus vinculaciones, que por propia capacidad.
El método es muy útil bien administrado en proyectos que se evalúan
en empresas en funcionamiento, donde el personal interno tiene experiencia
y conocimiento del mercado. Uno de los casos más comunes es el de los
vendedores que, con el conocimiento adquirido durante años en sus relaciones
con los clientes, pueden opinar calificadamente sobre las reacciones y
comportamientos que podrían resultar de la posible introducción o modificación
de un producto en el mercado; asimismo, el del personal de adquisiciones vinculado
con los proveedores de insumos de la empresa.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)